RevOltOso AmOr

Esperar el amor. ¿Qué significa? Quiero descubrir esa sensación extraña que solo se produce con una sola persona que esta cerca, al ser cómplices nuestros ojos de una lluvia inmediata de estrellas fugaces, ser cómplices en lo secreto y con el grito más silencioso: el del corazón.
Descubrir esas ganas desbordantes de compartir junto con la otra persona momentos únicos, irrepetibles, misteriosos, luminosos, compartirlos dando de cada uno lo mejor. 

Sin esperar nada pero dando todo mutuamente. Y así, recibir con más alegría, más emoción y más osadía con la que hemos entregado hasta el último rincón de nuestra alma, hasta el secreto más íntimo, hasta el deseo más profundo. Compartir y así llegar a la felicidad, tan pronto como uno queda dormido y sueña, rápido como una mariposa que agita sus alas al viento para llegar a la próxima flor, rápido como los delfines q nadan buscando el cálido mar. Pero claro, si la felicidad tiene que durar, tiene que llegar despacito, paso a paso, y arraigarse en lo más profundo de nuestro espíritu e impregnar el universo, nuestro universo, con su luz infinita y resplandeciente, contagiosa, de ánimo joven.
Y si para esto tengo que traspasar el túnel de la tristeza, el desgano, el dolor, la desilusión, la soledad, todos sinónimos de oscuridad, porque para reconocer la luz hay que descubrir que estamos ciegos en el vacío de la noche, lo pasearé con gusto, sabiendo que siempre todo termina por cambiar, y la lluvia deja de caer en la terraza del alma, las nubes se alejan dando lugar al sol, el astro de la sonrisa y la alegría, el cariño de la vida penetrando hasta los huesos y rayos de luz tocando hasta el rincón más oscuro del alma.
Sí, seguramente eso es el amor, un revuelto de emociones que todavía no encontré. Y mis ganas de descubrirlo siguen el juego de las horas más lejanas del reloj, cuando ellas se acercan, y todos duermen cerca nuestro, el sueño de esa historia por venir aparece tan nítidamente que no puedo negarle entrar en mi conciencia.

Sí, tengo ganas de descubrir el amor. Algún día, un hermoso día lo haré.